7. El poder de la imaginación.

El poder de la imaginación.

Primero debemos hablar de la creatividad como materia prima para el desarrollo de ideas. Existen muchos conceptos, pero en su forma más básica, la creatividad es la capacidad innata de encontrar soluciones innovadoras mediante un pensamiento distinto, alejada de los métodos comunes y viendo las cosas desde un ángulo distinto.

Para desarrollar ideas creativas, también son necesarias la curiosidad e imaginación, cualidades que podemos cultivar y mejorar. La creatividad tiene un impacto positivo, no solo en la creación de material publicitario o visual, podemos usarlo en todas las áreas de nuestra vida.

De la misma forma que los atletas entrenan cada día para mejorar su rendimiento deportivo, la creatividad puede y debe ejercitarse. Todo esto tiene un proceso neuronal, y si bien es cierto no podemos "aumentar" la cantidad de neuronas que tenemos, sí podemos ejercitar sus acciones, es decir, las conexiones entre ellas, de esa forma podemos pensar más rápido y con mejores resultados

Un salto por encima de la lógica.

Normalmente estamos acostumbrados a pensar de forma tradicional, poniendo la razón y la lógica por encima de todo. Nos atemoriza tomar riesgos, atrevernos a pensar y actuar de forma distinta, y es esa misma acción la que limita nuestro potencial creativo.

Nuestro cerebro tiene una gran capacidad. Algunos autores lo comparan con una gran bodega, donde se almacenan todos los estímulos que recibimos. La lógica funciona cuando de forma consciente extraemos ese material guardado y lo analizamos para resolver la situación problemática. Sin embargo, esta capacidad, aunque es útil, es limitada, porque una vez que el cerebro ya "agotó" todos los recursos del "consciente" nos quedamos sin soluciones, en un "estancamiento".

Pero no todo lo almacenado está ahí. También tenemos el inconsciente, y es el "almacén" que posee mayor abundancia de conocimientos. Cuando combinamos el uso de la lógica, con el inconsciente entonces liberamos nuestro potencial creativo. Solo que, el inconsciente se manifiesta de forma espontánea, no podemos acceder a el de forma "voluntaria", como si lo hacemos con el consciente. 

A esto es lo que comúnmente llamamos "inspiración". Cuando nos encontramos cansados de pensar sin encontrar una solución al problema, tendemos a dejarlo un rato. Luego, la mente, accede al inconsciente donde se han estado desarrollando infinidad de combinaciones, que recopilan nuestras experiencias pasadas y actuales, para entonces llegar a nosotros en forma de "ideas", que son totalmente diferentes a las que con nuestro "pensamiento lógico" intentábamos acceder.

El valor de la inteligencia.

Se ha hablado mucho que la imaginación es la parte vital para ser creativos. Es cierto que juega un rol muy importante e indispensable. Sin embargo, la imaginación solamente no puede crear. Para que funcione debe usarse en conjunto con la "inteligencia". 

Con la inteligencia podemos discernir si las ideas que han germinado en nuestro subconsciente son aptas o no para la solución al problema en cuestión. Primero debemos estudiar todas las opciones, de ambas fuentes, las racionales y las surgidas de la imaginación.

También debe hacerse un énfasis que para que la creatividad se desarrolle libremente, debe estar alejada de los prejuicios e imposiciones sociales, por eso se dice que los recién nacidos son los más creativos, porque aún no han sido influenciados por la sociedad y su negativismo o ideas forzadas.

El mito del genio.

Cada ser humano nace con algo especial, algo que lo hace único a los demás. Cada quien piensa de forma distinta, pero es la sociedad, quien, en su afán de "integrarnos" a ella, de ser "más sociables", nos aleja de nuestro pensamiento individual y nos hace tomar las semejanzas o "normas establecidas", que también limitan nuestro pensamiento creativo.

No hay persona que no sea creativa, y ya mencionamos que esta área no se aplica solo a materias como el diseño o publicidad. Somos creativos cuando buscamos una solución no tradicional a nuestros problemas. Pero como la sociedad quiere que pensemos igual, vamos apagando progresivamente esos talentos y habilidades. Y no lo hacen por una mala razón, dado que incluso nuestros padres y maestros nos forman de esa manera.

Cuando una persona se atreve a pensar diferente, ir contra la corriente, buscar lo no convencional y ver las cosas desde una perspectiva distinta, entonces es llamado inadaptado, antipático, antisocial. Sin embargo, si analizamos los precedentes, los grandes pensadores e inventores en la historia de la humanidad han presentado "síntomas" similares. Eran introvertidos, gustaban más de la soledad y pensamientos reflexivos que en grandes fiestas o convenciones sociales.

Automáticamente, cuando vemos surgir a alguien tan brillante, entonces lo llamamos "genio", cuando en realidad, es una persona como nosotros, con la única diferencia que él o ella si se atrevió a ir contra la corriente. Es una persona que hace uso activo y eficaz de su creatividad.

Todos podemos ser creativos.

Solo hace falta "desvincular" nuestro pensamiento al convencional, de esa forma desarrollaremos mejor nuestra creatividad. Para ello, existen 3 principios básicos:

• No confiar exclusivamente en nuestro pensamiento racional o experimental.
• No definir nada como único o definitivo.
• Desarrollar la imaginación a través de la producción constante de asociaciones.

La creatividad y el surgimiento de ideas son "directamente proporcionales" a la capacidad que tengamos de ser abiertos a las posibilidades. No hay que dejar nada como definitivo porque esa "solución" puede ser la incorrecta, mientras desechamos otras que nos parecían "absurdas" que sí eran efectivas.

Lo que conocemos como creatividad es considerar todas las opciones, asociando ideas, relacionando conceptos, que por muy ridículos que parezcan, no debemos desecharlos. 

Lo más saludable e inteligente, es tomarnos el tiempo para estudiar todas las ideas, sin importar su origen. Cotejarlas con nuestras experiencias previas, y luego de un proceso de selección escoger la más adecuada.